La primera fase de esta expansión se centrará en Albacete, Madrid, regiones estratégicas para su desarrollo. En una segunda etapa la cadena se implantará en las provincias de Ciudad Real, Toledo.
Tras el éxito obtenido en Andalucía, donde está presente con 74 establecimientos, la enseña ha abierto recientemente una pizzería en Lorca (Murcia) y en Casas Ibáñez (Albacete), en breve se abrirá en Albacete capital y Madrid.
Para hacer frente a esta estrategia Voy Volando tiene previsto reforzar sus servicios centrales, que hasta ahora estaban adaptados para la región andaluza, con el objetivo de garantizar el mismo soporte en el resto del país.
Desde sus oficinas la compañía suministrará todo el equipamiento y materia prima necesarios para el funcionamiento de los locales, al mismo tiempo que proporcionará el soporte técnico y la formación que requieren los futuros franquiciados.
Después de más de 17 años de experiencia en el mercado y el respaldo de una red consolidada, Voy Volando quiere llegar al mediano empresario que pretende invertir en un negocio de éxito con una inversión muy ajustada dentro del ámbito de la restauración, asegurando una rápida recuperación de la inversión.
De esta manera la cadena se presenta como un concepto de negocio único que ha logrado reunir una extensa oferta de pizzas gracias a una filosofía de empresa basada en el desarrollo constante de novedades. Además su propuesta incluye una cuidada selección de platos de pasta compuesta por espaguetis, tallarines, lasagna, canelones, ensaladas, etc.
La inversión necesaria para instalar una franquicia Voy Volando parte de 40.000 euros, dependiendo en todo caso del estado de los locales, que deben estar ubicados en poblaciones con un mínimo de 8.000 habitantes. La enseña no cobra royalties y ofrece financiación en el canon de entrada, ventajas que representan una gran oportunidad para el autoempleo.
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